
Éste no es sino otro capítulo más de nuestra Liga española, quizás la mejor Liga del mundo (con permiso de la Premier, por supuesto), pero también la más alocada. De hecho, el BarÇa, aparentemente muerto hace ocho días, se ha colocado a tan sólo un puntito del Real Madrid. En el 3-0 azulgrana sobre el Betis, el francés Thierry Henry abrió el marcador para alegría de la parroquia barcolenista, al tiempo que Ronaldinho calló muchas bocas con dos soberbios goles.
Por su parte, el Real Madrid vuelve a estar a los pies de los caballos tras su agitada y merecida derrota en el Pizjuán. El Sevilla se le atraganta. Lejos queda aquel 1-5 frente al Valencia que encumbró al mismo equipo que pocos días después cayó estrepitosamente frente al club de Nervión. Cara y cruz. Una de cal y otra de arena. Y Schuster que vuelve a hacer de las suyas en rueda de prensa. Si un árbitro es catalán no tiene porqué pitar en contra del Madrid, del mismo modo que si Schuster es alemán nadie tiene porqué emparentarlo con los nazis. Son asociaciones ridículas.
El incombustible Morientes dio al Valencia post-Quique lo que necesitaba de urgencia: una victoria. Aunque el Mallorca tuteó en principio a los de Fernández, el "Moro" cumplió y resolvió la papeleta con holgura y buen tino. El Valencia toma aire en campo ajeno: 0-2 frente al Mallorca en un duelo de altos vuelos.
De los 28 goles que registró la jornada, la cuarta parte se produjo en el Vicente Calderón. Tras el 4-3 del domingo pasado frente al Sevilla, ayer el equipo colchonero obtuvo idéntico marcador, pero al revés. El Atlético ataca de lujo y defiende de pena. De hecho, se adelantó en dos ocasiones en el marcador, y aún así perdió. El Villarreal dio una lección frente al desaliento. Fue un viejo conocido, Nihat, el que dio la puntilla a los de Aguirre.
El Real Murcia tomó de su propia medicina, y el Depor de Lotina, también necesitado de puntos, lo apuntilló a la contra (0-2). El equipo pimentonero defiende mejor que ataca, pero cuando va por detrás en el marcador sufre mucho porque se ve impotente en ataque. Baiano está perdido en la inmensidad de la Nueva Condomina y no da señales de vida ni de mejoría. Vamos, que no le mete un gol ni al arco iris, y miren que es grande y ancho.
Al Zaragoza le entró otra pájara. Sus seguidores deben estar bajo tratamiento tras el 0-2 que encajó su equipo en la Romareda frente a un Valladolid que toma aire en la clasificación.
Michael Laudrup ya es un hombre feliz. El equipo sigue dando buena imagen, pero ahora además gana. En esta jornada el Getafe logró arañar, por fin, fuera de su casa. Y lo hizo ganando a uno de los pocos equipos que aún no había perdido en su estadio. 0-2 en Pamplona frente a Osasuna, y los madrileños que abandonan, después de once semanas, los puestos de descenso.
El Levante ganó por fin. Un enorme Riganó le marcó tres goles al Almería (3-0). Por su parte, el Espanyol cada vez apura más: en Santander, Tamudo empató de penalti en el minuto 90 (1-1). En San Mamés los leones vuelven a morder. Etxeberría marcó en 90 minutos los mismos goles -dos- que en los últimos tres años. Ya era hora. Su Athletic ganó 2-0 al Recreativo de Huelva.
1 comentario:
La verdad esk la jornada 11 estuvo muy interesante! Encima con la victoria del Murcia..
Publicar un comentario